CONTENIDO LITERAL

("Los viajes de Tuf", comentario de Joan Manel Ortiz. Derechos de autor 1990, Joan Manel Ortiz)

Estamos no frente a una novela, sino delante de una serie de relatos con un protagonista en común: un mercader honesto y más bien llenito que pasa por ser el poseedor de la última de las Sembradoras del antiguo Cuerpo de Ingeniería Ecológica de la Vieja Tierra. El Arca.
Las siete historias que integran el presente volumen narran las andanzas de Tuf por todo lo largo y ancho de este Universo, el cual se dedica a aplicar la tecnología de la nave y su peculiar sentido de la Ecología para ir resolviendo los problemas que se le plantean en los más remotos mundos. Tuf es una persona carismática, obeso, de tez blanquecina, vegetariano, que no soporta el contacto con sus semejantes, y que vive acompañado por sus inseparables gatos (otro de los ejemplos de la importancia de dichos felinos en la SF, tal y como apuntaba tan certeramente Juan Carlos Planells en su artículo aparecido en Tránsito 13). Y el Arca es una nave gigantesca de más de 1000 años de antigüedad, capaz de las más sofisticadas tareas genéticas y biológicas y con unas reservas de seres que harían las delicias de cualquier científico loco de serie B. La tarea que tenían asignada estas naves era la Guerra Ecológica, pero Tuf la utiliza para otros fines: el equilibrio ecológico.
Nos encontramos ante uno de los personajes más interesantes que ha parido la SF últimamente, y encima Martin ha sabido darle la dosis justa de humor para conseguir una figura que acaba por convertirse en entrañable.
Los viajes de Tuf comienzan, claro está, narrando como llegó el Arca a manos de Tuf, y debo reconocer que este capítulo se ha convertido en mi favorito. Está excelentemente escrito, con mucho ritmo, y todos los personajes que participan en él están muy bien definidos (lo cual es el sello de este autor). Su título, "La estrella de la plaga".
"Guardianes" es más flojilla, aunque su final es sorpresivo: en un planeta casi en su totalidad acuático comienzan a aparecer monstruos que amenazan la supervivencia de sus habitantes humanos.
"Una bestia para Norm" es una delicia hilarante. Monstruos made in Tuf para un mundo donde las peleas de monstruos son el deporte nacional y el poder. Sin desperdicio.
Curiosamente el que primero fue escrito, "Llamadme Moisés" (1978) es tal vez el que menos me ha gustado (aunque también esté bien escrito). Un fanático religioso da un golpe de estado e intenta volver una sociedad tecnológica en feudal. Curiosillo.
¿Y qué decir de las tres historias que tienen por escenario el superpoblado mundo de S'uthlam, con su partenaire Tolly Moune, Maestre del Puerto? Aquí es donde más se puede apreciar el particular sentido de la Ecología que tiene Tuf, y donde más detalles del carácter de este personaje se ven reflejados. Imprescindibles.
Miles de gracias a los señores de B por la publicación de estos Viajes... y deseamos fervientemente que su segunda parte, que debe hacerse editado recientemente en los USA, no se haga esperar demasiado.