CONTENIDO LITERAL

("Volver a empezar (Replay)", comentario de Xavier Riesco Riquelme. Derechos de autor 1995, Xavier Riesco Riquelme)

La posibilidad de vida después de la muerte es un asunto bastante explorado en los caminos de la literatura fantástica. Ahí no hay nada nuevo. Sin embargo lo que parece que a nadie se le había ocurrido es que la vida después de la muerte pudiera ser ésta, otra vez la misma vida que se tuvo. Esta es la premisa básica de Volver a empezar, la(s) vida(s) de Jeffrey Winston es rebobinada como una cinta de cassette una y otra vez desde su muerte a los cuarenta y tres años hasta su juventud y vuelta a empezar en una especie de eterno retorno nietzchiano en el que, sin embargo, nada ocurre igual dos veces. Sólo la muerte parece el mojón de la existencia de Winston; el punto fijo de referencia.
Afortunadamente la consciencia del sujeto, el libre albedrío, no se ve forzado a tomar las mismas opciones que se dieron en la vida anterior, es libre de hacer lo que quiera y posee mucha información de antemano de lo que va a ocurrir en el futuro. Esta es la parte más interesante del libro: la exploración de todos los derroteros que puede tomar una vida. Así Winston intenta evitar el asesinato de Kennedy en una, se convierte en un hedonista absoluto en otra, hombre de negocios extremadamente rico, profeta para los servicios de inteligencia norteamericanos, ermitaño retirado del mundo que conoce demasiado bien... y sobre todo, en enamorado que espera la vuelta, como él hace, de su amada. Porque no está solo. Hay otra gente que hace el mismo recorrido que él, que tiene la misma capacidad que él para alterar la secuencia de sucesos del mundo en el que vive. Mediante la aparición un suceso que originalmente no sucedió durante su vida original y que él no ha provocado de una película de ciencia ficción llamada Starsea empieza a darse cuenta de esos otros repetidores, la gente que vuelve atrás, y encuentra a Pamela Phillips, que será su compañera en muchas vidas posteriores.
Aparte de idea principal y de la historia de amor entre Jeffrey y Pamela un amor motivado más bien por sus condiciones de repetidores, su soledad frente al resto de la especie humana, nos encontramos ante la especulación por parte de los personajes del por qué de sus repeticiones y el acortamiento de estas, llevándoles hacia el punto de su "muerte". Grimwood no desvela nada directamente, pero el final de la novela, aunque simple, es tremendamente efectivo para apuntar la dirección real de tales repeticiones, coincidiendo con una teoría esbozada por los personajes a lo largo del libro. Es, sin embargo, el lector el que debe sacar sus propias conclusiones acerca de su significado.
Un libro merecedor del galardón que ostenta, el Premio Mundial de Fantasía y de figurar en Literatura fantástica: las 100 mejores novelas de David Pringle. Una obra de escritura simple pero válida, de una extraña fuerza en los personajes y contundencia en la historia.
He de hacer una pequeña crítica, sin embargo, a la edición de Martínez Roca: Se halla plagada de erratas bastante evidentes y las reseñas utilizadas en la contraportada son bastante dispares. Una proviene del antes mencionado Literatura fantástica: las 100 mejores novelas de David Pringle y la otra proviene de una revista española dedicada a los juegos de rol. No es la primera vez que un libro de Martínez Roca aparece con una reseña similar (El color de la magia tenía una de la revista Líder, también de juegos de rol) pero parece como si el libro hubiera sido editado e impreso a toda prisa por motivos que escapan a mi entendimiento. Quizás el convertirlo en libro de verano, juzgando por la cantidad de títulos editados por Martínez Roca en los últimos meses.