CONTENIDO LITERAL

("Eric Frank Russell", artículo de Armando Boix. Derechos de autor 1995, Armando Boix)

Aunque nacido en Sandhurst, Surrey, Eric Frank Russell apenas puede ser considerado en esencia un escritor británico. Su nombre empezó a popularizarse a través de las revistas americanas, de ellas recibió sus influencias y en ellas maduró como autor, bajo las directrices de John W. Campbell.
Hijo de militar, pasó buena parte de su infancia en Oriente y de regreso a Inglaterra siguió ese errático vagar de empleo en empleo que parece lugar común entre muchos autores del género. Es en 1934 -trabajaba entonces como viajante de comercio y acababa de casarse- cuando entra en contacto con la British Interplanetary Society, agrupación dedicada a la astronáutica entre cuyos miembros figuraban numerosos aficionados a la ciencia ficción, como Arthur C. Clarke y Leslie J. Johnson, con el que colaborará en alguno de sus primeros relatos. Este último, tras leer unos artículos que Russell había publicado hasta entonces, bajo el título Interplanetary Communication, le animó a escribir narrativa. Ambos redactaron Eternal Rediffusion, sobre idea de Johnson, un argumentista imaginativo pero de poca habilidad como redactor. El relato fue enviado a la revista Astounding Stories, dirigida por F. Orlin Tremaine, siendo rechazado (La renacida Weird Tales lo acogería en sus páginas, en 1973. Antes había tenido una única publicación semiprofesional en el Fantasy Booklet, de Philip Harbottle).
Su primera historia publicada profesionalmente habría de esperar a 1937: The Saga of Pelican West, aparecida en el número de febrero de Astounding, en la que ya se revela la influencia de Stanley G. Weinbaum, una de las principales en los primeros tiempos de su carrera. Ese mismo año le siguen The great radio Peril y Seeker of tomorrow, de nuevo en colaboración con Johnson, sobre el manido tema del viaje en el tiempo y con sospechosas similitudes con Armagedon, 2419 D.C. (1928), de Philip Francis Nowlan.
En junio de 1937 aparece una de las revistas de ciencia ficción pioneras en Gran Bretaña, Tales of Wonder, en cuyo primer número Russell publicará el relato The Prr-r-eet, muy bien recibido por los aficionados, que le brindará la oportunidad de divulgar su obra en su país. Su mayor éxito no lo consigue, sin embargo, hasta 1939, también en el número de debut de una revista, Unknow, dirigida por John W. Campbell -que desde octubre de 1937 también manejaba las riendas de la veterana Astounding-. Se trata de la novela Sinister barrier, en la que Russell recoge la teoría de Charles Ford, expuesta en The book of the damned (1919), de que la humanidad se encuentra bajo el control de una raza extraterrestre, para la que no somos sino ganado, con el objetivo de alimentarla con nuestros sentimientos y dolores. Esta obra sobre vampirismo psíquico es de las más reeditadas y nos muestra perfectamente los principales rasgos de su producción: escritura fluida, desarrollo lineal y gusto por la intriga y la acción en los argumentos.
Russell continuará escribiendo con entusiasmo, formando parte de un grupo -Asimov, Heinlein, Sturgeon, Simak- que se convertirá en clásico bajo la égida de Campbell, empeñado en la difusión de una ciencia ficción adulta, atractiva pero racional, que incidiera más en los aspectos humanos y sociales que en los puramente tecnológicos o aventureros. Esta actividad creadora no se detendrá ni durante su participación en la Guerra Mundial, como miembro de la Royal Air Force, si bien cuantitativamente se verá disminuida. Fruto de este período es, precisamente, su serie de aventuras espaciales de gran popularidad, formada por los relatos "Jay Score" (1941), "Mechanistria" (1942), "Symbiotica" (1943) y "Mesmerica" (1955), recogidos en el volumen Men, martians and machines (1955).
Después de la contienda prosigue su obra, que dará éxitos como la serie Dreadful Sanctuary (1948), y nos demuestra que no sólo es un hábil urdidor de intrigas, sino su gran capacidad para una literatura más sensible y preocupada por los problemas del hombre, con relatos como Dear Devil (1950) y The Witness (1951); al tiempo que desarrolla sus sátiras antibelicistas Late night final (1948), I am nothing (1952) y ...And then there were none (1951).
Sin síntomas de agotamiento tras casi veinte años de labor, en 1955 su humorístico Allamagoosa es premiado con el Hugo al mejor relato corto y escribe para Astounding la serie Call him dead, que aparecerá como libro en 1956, bajo el título de Three to conquerer. Tras novelas como Wasp (1957), una space opera sobre las andanzas de un agente secreto, en los sesenta decae su publicación en revistas populares, aunque nos ofrece obras de importancia directamente como libro -With a strange device (1964)-. Publicó también ensayos como los recogidos en Great world mysteries (1957), en los que sigue la línea de Charles Ford, del que fue toda su vida un ardiente defensor.


BIBLIOGRAFÍA ORIGINAL COMPLETA.

Sinister Barrier. Novela. 1943.
Dreadful Sanctuary. Novela. 1951.
Sentinels from Space. Novela. 1953.
Deep Space. Relatos. 1954.
Men, Martians and Machines. Relatos. 1956.
Three to Conquer. Novela. 1956.
Wasp. Novela. 1957.
The Great World Mysteries. Ensayos. 1957.
Next of Kin. Novela. 1958. Publicado también bajo el título The Space Willies.
Six Worlds Yonder. Relatos. 1958.
Far Stars. Relatos. 1961.
Dark Tides. Relatos. 1962.
The Great Explosion. Relatos entrelazados. 1962.
The Rabble Rousers. Ensayo. 1963.
With a Strange Device. Novela. 1964. Publicada también bajo el título The Mindwarpers.
Somewhere a Voice. Relatos. 1965.
Eternal Rediffusion. Relato. 1973.
Like Nothing on Earth. Relatos. 1975.
The Best of Eric Frank Russell. Relatos. 1978.
Design for Great-Day (con Alan Dean Foster). Novela. 1994. Versión expandida de una novela corta de 1953 de igual título.


EDICIONES ESPAÑOLAS DE SU OBRA.

Tres que capturar (Three to Conquer; 1956). Novela. Ediciones Cenit, col. Selecciones de Ciencia Ficción. Barcelona, 1962.
Avispa (Wasp; 1957). Novela. Tr: Domingo Santos. 237 pags. Editorial Acervo, col. Acervo Ciencia Ficción. Barcelona, 1980.
Barrera siniestra (Sinister Barrier; 1943). Novela. Tr: Roberto Aguilera. 242 pags. Ediciones Tridente, col. Púlsar Ficción. L'Hospitalet de Llobregat, 1992.